No es difícil que en estos meses fuertes de calor y teniendo tanto tiempo libre en nuestras vacaciones nos expongamos de manera muy continuada al sol.
En la mayoría de los casos tomamos precauciones protegiendo nuestra piel previamente, pero debido a las fuertes temperaturas, que muchos productos prometen ser resistentes al agua, y todo hay que decirlo, a veces nos da pereza cada dos por tres aplicarnos una buena capa protectora, terminamos después de una jornada de sol como la pobre chica de la fotografía...
Os quiero dar algunas recomendaciones muy efectivas para el después de...es decir para cuando estamos ya en casa, nos hemos duchado y nos sale toda la fiebre en la piel quemada....
Antes de nada prepararemos unas compresas de vinagre, si si vinagre, ( una toalla mojada completamente en vinagre de mesa) y escurrida y la colocaremos en la parte quemada durante al menos 15 min.
La sensación es de mucho frío y frescor incluso en ocasiones nos parece que no vamos a poder aguantar esa sensación, ( No escuece ni pica) solo es frescor y sensación de frio.
Transcurridos estos 15 minutos de manera casi sorprendente notaremos que esa fiebre, calor o quemazón a pasado a la compresa de vinagre ( Toalla) notando que la toalla tiene una temperatura altísima, y nuestra piel esta relajada y tranquila, acto seguido daremos una buena capa de after sun, y repetiremos esta buena capa de after sun si es necesario.
Con este sencillo truco o remedio casero, evitaremos pelarnos, sufrir en las noches posteriores a la exposición solar, evitaremos las rozaduras incómodas de la ropa, y diferentes reacciones solares, en algunos casos hasta ampollas y heridas.
Y para terminar es importante descansar del sol si esto nos ocurre en dos tres semanas por lo menos, recordar el sol quema HOY y pasa factura MAÑANA... lo que hoy es una piel quemada por el sol, mañana se puede convertir en un problema mucho mas importante....
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